A través de una carta abierta dirigida al Papa Francisco, la Asociación Nacional de Padres de Familia de Colegios Privados (ANAPEF), exhortaron al sumo pontífice a brindar su apoyo y dirección ante las escuelas administradas por la Iglesia Católica, sus congregaciones y representantes, a fin de revisar la dirección de colegios católicos en todas partes del mundo, pero sobre todo en Perú, y que las pensiones sean reducidas al 50% o cerca a esa cifra.
La ANAPEF detalla que este es un justo reclamo de las familias que llevan a sus hijos a colegios católicos en todo el Perú, que son administrados por congregaciones, diócesis y asociaciones relacionadas con la Iglesia Católica.
Piden que el Papa “haga entrar en razón a las Autoridades Eclesiásticas peruanas”, para que surja la solidaridad con los padres de familia que piden una mejor educación telemática para sus hijos, con pensiones reducidas al 50%, o muy cercano a esa cifra.
Detallan que las actuales circunstancias que limitan la educación presencial, y las graves dificultades económicas por las que pasan miles de padres de familia.
Recordaron que en su homilía del pasado domingo 19 de abril, el Papa Francisco advierte a la humanidad sobre el “riesgo del egoísmo indiferente”, que puede ser tan letal o peor que el Covid-19, causante de la pandemia global. Una pandemia que ha dejado no solo muerte a su paso, sino angustia y, a miles de padres de familia, sin sus ingresos habituales.
Asimismo, se refirió que, “sin una visión de conjunto nadie tendrá futuro”, y eso es lo que proclamamos las familias miembros de ANAPEF con hijos en colegios regentados por la Iglesia Católica y de cualquier otra administración. Los padres queremos pagar. Sin embargo, ante esta pandemia, no podemos hacerlo como antes, y es esta la solicitud de pensiones que se ajusten a la nueva realidad, para luego juntos reconstruir un mundo nuevo.
Por ello, agradecen al Santo Padre su atención y ruegan que su solicitud tenga eco en el mundo entero y, en especial, en nuestro país Perú. Y que, junto con los representantes pertinentes, se pueda llegar a un acuerdo común para el bien de todos. Esta lucha se vence en conjunto.
La carta lleva la firma de Agnieszka Céspedes Gawd, fundadora ANAPEF.