· Es importante ubicar un ambiente adecuado dentro de la casa que no genere distracciones.
Ante la suspensión indefinida de clases escolares de manera presencial para evitar la propagación del nuevo coronavirus, miles de escolares vienen recibiendo desde sus hogares clases a distancia, también conocidas como clases virtuales. Sin embargo, estudiar de manera “online” requiere de un gran compromiso y organización de parte de los padres y sus hijos. Por esta razón, la doctora Giovanna Valdespino, Jefa de Programas Preventivos de Sanitas, brinda en este artículo, diez tips para tener un buen rendimiento estudiantil ante esta nueva modalidad de estudio escolar.
- Es importante tener un buen descanso y sueño reparador para iniciar las actividades diarias, más aún si estas actividades exigen atención y concentración. Por ello, se recomienda habituar a los niños a un horario, acostumbrándolos a dormir temprano.
- Tener buenos hábitos de limpieza. Tomar una ducha diariamente, ayuda a sentirse renovado y a empezar el día con entusiasmo.
- El desayuno es el alimento más importante del día. Los niños deben alimentarse antes de empezar las clases. No salte el desayuno, porque la sensación de hambre no lo dejará concentrarse.
- Adecúe un lugar especialmente para que el niño se conecte a clases, deje que él participe acondicionando ese espacio para que sienta pertenencia con su “lugar de estudio”. Se recomienda que tenga ventilación, buena iluminación y capte la señal de internet.
- En los intermedios de descanso o lonchera, anímelo a caminar, estirar brazos y piernas. Es buen momento para ofrecerle frutas y beber agua. Evite darle galletas o golosinas.
- Durante la clase virtual, aleje los ruidos del televisor, equipos de sonido, y las conversaciones familiares, para que el niño se mantenga concentrado.
- No permita que estudie en la cama. Es importante que el niño mantenga buena postura, por ello, lo mejor será hacerlo en un escritorio con espacio suficiente para colocar sus materiales como cuadernos, lápices, libros, etc.
- De manera intermitente, supervise las actividades que realiza el niño, pregúntele si está cómodo y anímelo a participar en clase.
- Establezca un horario luego de clases para realizar las tareas que le asignen.
- Aliméntelo sanamente, ofreciéndole más verduras, proteínas y frutas a diario. De esta manera, el niño se mantendrá saludable y con un peso adecuado.